Claro, ese es el ambiente donde he crecido, de hecho, Sevilla Record era mi segunda casa, pero todo lo que comprabas nuevo te llegaba "de palabra" o porque te ponen una canción en un momento, en tertulias que surgen y cosas así. Pero es que de hecho, ha mejorado tantísimo la situación musical que yo le enseñé Spotify a una persona de ese mundo, un tipo que tenía hasta una emisora musical Heavy-Rock, y lleva suscrito pagando la suscripción más de diez años y él mismo te reconoce que lo de hoy es otra historia, envidia el momento actual de la música, es lógico.
El tema es que nos hacemos viejos y nos dejamos llevar por la nostalgia, eso desvirtúa nuestra versión. Pero vaya, hablando de rap y rock, una íntima mía era dependienta de una tienda de música de estas importantes del centro de Sevilla, muy de rock, muy heavy, muy punk... y curiosamente fuí allí donde conocí en persona a La Mala de Jerez hace ya veinticinco años. Y recuerdo aquel momento desagradable en dos vertiente: uno porque es una tía insoportable que nos jodió la tarde a unos amigos y a mí y otra porque vaya tela, que el Heavy se muere para traernos a esta zumbada cantando gilipolleces.
En fin, Rives, que todo en la vida cambia y no tiene por qué ser a peor.