Luego era curioso el código de honor que llevaban. Con los Punks (me incluyo) se llevaban “bien”. Aunque a mi me tenia nervioso el tenerlos revoloteando, pero se ve que el compartir litros y porros hacían más amigos que los donetes. Incluso eran aliados no buscados cuando algún que otro facha venia con ganas de irse calentito a casa